![]() |
LEYES DE LA ABUNDANCIA - CAUSA Y EFECTO |
También conocida como La Ley del Karma, La Ley de la
Retribución, La Ley del Círculo, esta ley decreta que todo lo que hacemos sea
bueno o malo, ya sea en pensamiento, sentimiento, palabra u obra, regresa a
nosotros en algún momento. En palabras de San Pablo: "Pues lo que uno
siembre, eso cosechará"(Gálatas 6:7).
A través de esta ley, aprendemos las lecciones que la
Vida nos da sobre nuestros errores del pasado, con esta ley se mantiene el
balance de nuestras deudas hacia la Vida misma, por el uso y el abuso de los
bienes que Dios nos ha dado.
Habrás notado algunos casos de personas que habiendo
tenido una gran posición financiera en el momento más inesperado lo pierden
todo, tal vez esta persona tenga una conciencia de abundancia, pero si ella en
el pasado abusó de sus bienes, o si los derrochó innecesariamente, entonces por
Ley deberá experimentar la carencia para que aprenda a valorar lo que tiene. Te
podrás preguntar, y ¿por qué hay personas que nacen en familias pobres y otras
en familias adineradas? ¿Cómo pueden haber hecho algo malo si recién vienen al
mundo? Este es un sencillo ejemplo, más sin embargo esta ley es mucho más
compleja y tiene en cuenta lo que hayamos hecho en otras vidas, si, en otras
vidas y aquí entra un concepto muy importante, "La Reencarnación, los
actos que hayamos realizado en vidas pasadas se reflejan en nuestra vida
actual, retomando la frase de un Gran Maestro, "El futuro es lo que hacéis
de él, tal como el presente es lo que hicisteis de él". Esta es la razón
por la que hay personas que vienen al mundo con limitaciones, mientras otras
nacen rodeadas de todos los lujos posibles, por qué algunos nacen con
enfermedades y otros sanos. Esta Gran Ley determina las circunstancias que se
presentan en tu mundo para saldar la deuda que tengas con la Vida, con Dios,
pero afortunadamente tenemos un Padre misericordioso que nos da la oportunidad
de corregir nuestros errores, a través del Perdón, perdónate a ti mismo y
aprende a perdonar a los demás, pero sobre todo pide perdón por tus errores y
para que no los vuelvas a cometer.